La Real Academia Española define “astro”, el sustantivo común, como:
- Cada uno de los innumerables cuerpos celestes que pueblan el firmamento.
Nosotros podemos definir “Astro”, el nombre propio, como:
- Joven banda chilena de pop psicodélico/electrónico de ascenso estratosférico.
Y es que pareciera que el éxito de los chilenos es propulsado por LOX o LH2, los mismos combustibles que envían a los transbordadores fuera del planeta. El reconocimiento internacional les llegó pronto y es que su calidad es innegable, amasando un séquito de “astronautas” fieles que siguen atentamente su travesía.
¿Qué hace con sus videos una banda que habla de conejos y titula canciones con nombres como “Druida de las nubes”? Fácil. Nos cuenta historias.
“Colombo” es el objeto mágico hecho de cuarzo puro. Luminiscente. Al más puro estilo de Star Wars, los bandos se dividen entre “las criaturas de la noche” y “las criaturas de la luz”. La milenaria y quizá infinita batalla entre el “bien” y el “mal”. En el primer asalto, las criaturas de la noche se enfrentaron contra tres monocromáticos “guerreros” de luz, robándoles la preciada pieza. Cosmo, la figura barbada que aparece recurrentemente en una esfera destellante, es el guía telepático del bando luminoso que deberá recuperar el “Colombo”. Una mujer, al igual que Obi-Wan Kenobi, con un movimiento de manos deja inconscientes a los guardias de la noche que custodiaban al mineral. Con su sagrada roca en las manos, los lumínicos caminan por Los Andes en una procesión espiritual victoriosa. Cosmo despierta de su meditación y como líder del clan, es el encargado de devolver el “Colombo” al altar a donde pertenece. Comienza la algarabía. Cosmo, Colombo y las figuras monocromáticas parecen, por un momento, condensarse en fulgores dentro de los ojos del líder. Fin.
Dirigido por el mexicano Carlos Rincones, que entre su currículum se destaca el haber trabajado con Quentin Tarantino y Robert Rodríguez, “Colombo” es una bonita creación visual que aprovecha los paisajes naturales de Chile a la perfección y nos relata una corta pero entretenida versión de la ya antes vista historia sobre dos bandos en conflicto, un objeto en discordia y el triunfo del bien.